La cubierta es una de las partes más importantes de cualquier construcción. Es la que cierra la edificación y la protege de las inclemencias del tiempo (lluvia, frío, calor, viento…). Por ello es muy importante que la cubierta esté bien impermeabilizada y que no filtre agua que pueda dañar las estructuras. También es conveniente un buen aislamiento del techo para protegernos del frío y del calor. Puedes ver nuestras recomendaciones para impermeabilizar y aislar una vivienda aquí.
Básicamente hay dos tipos de cubiertas: